Haz del próximo año, el mejor de todos

Si los propósitos que hiciste el 31 de diciembre del año pasado se te olvidaron con la última uva que comiste, repasa esta lista de propuestas para hacer del año que inicia uno de total y absoluta renovación.

Agradece

La mejor manera de empezar el año es enfocarte en las cosas buenas que hay en tu vida.

Todos los días, toma un momento para agradecer las cosas materiales, como la casa en la que vives y la comida que te nutre, así como los pequeños placeres, como escuchar una canción maravillosa en la radio (y tu sentido del oído que te permite disfrutarla), tener el cariño de tu animalito de compañía, los buenos detalles de tus amistades o recibir una invitación inesperada.

Minimalízate

Llenarse de objetos innecesarios es un hábito malsano que puede acabar con la tranquilidad de cualquiera.

Comienza poco a poco: concéntrate en una zona atestada de cosas (puedes empezar por un cajón de la cocina) y ordénala; después dirígete a áreas más intimidantes como el cuarto de visitas… ¡que se ha convertido en bodega!

Ahora queda el tema de cómo deshacerte de tantas cosas de forma que no terminen contaminando la tierra y el agua desde un relleno sanitario. El siguiente propósito te puede dar una idea.

Ayuda a los demás

Las comunicaciones nos llevan a sentir interés por lo que sucede en todos los rincones del planeta, así que no es de sorprender que surjan actividades de voluntariado en vacaciones en todo el mundo. Pero si no quieres viajar a un lugar distante y prefieres ahorrar dinero, basta con ofrecer tu tiempo a una buena causa cerca de tu hogar.

También puedes donar muebles, ropa, juguetes y enseres domésticos (todas esas cosas que decidiste sacar de tu casa al poner en marcha el propósito anterior) a quienes sí las necesitan. Sin duda, esto te hará sentir muy bien, y contribuirá al bienestar de todas las personas que te rodean.

Aprende algo nuevo

Nada aumentará tu autoestima como iniciarte en una nueva actividad por diversión. Con esto ejercitarás tu cerebro y te olvidarás por un rato de los problemas de la vida diaria.

No importa si no te consideras una persona artística, lo que cuenta es que eches mano de tu creatividad (sí, ¡todos tenemos creatividad!). Puedes asistir a clases presenciales, tomar un curso en línea (YouTube es una mina de oro) o pedirle a un familiar que te enseñe. ¡Anímate!

Ordena tus finanzas

Este puede ser el año en el que por fin tomes el control de tu economía. Cuando te caiga un dinerito extra, usa la regla de tres: con un tercio paga alguna deuda, mete otro tercio directamente a tu cuenta de ahorro y con el último tercio haz algún arreglo en el hogar o cómprate algo.

Hay infinidad de aplicaciones y coaches de finanzas que te pueden ayudar a organizarte y hacer buen uso de tus ingresos.

Pasa más tiempo con familiares y amistades

Muchos de nosotros sentimos que no pasamos tiempo de calidad con nuestros seres queridos. Toma el teléfono o enciende la computadora y comienza a hacer planes con ellos.

He aquí una forma de lograrlo: envía un correo electrónico en el que los invites a un día de campo en un parque accesible. Cada quien llevará comida, bebida ¡y muchas ganas de ponerse al tanto!

Desplastifícate

Lo más fácil de cambiar: los artículos de aseo personal, como el cepillo de dientes (cómpralo de bambú en línea o en tianguis artesanales) y el rastrillo para afeitar (busca uno de metal, como el que usaba tu abuelito). Sirven tan bien (o mejor) que las versiones de plástico, con la ventaja de que no contaminan.

Ponte en forma

Programa tiempo para entrar en acción; sé perseverante. Usa un podómetro para tratar de dar 10,000 pasos al día. Queda con alguien para salir a caminar durante 30 minutos dos o tres veces por semana.D

Deshazte de los malos hábitos de salud

Ya sabes que el cigarro daña tu cuerpo y aumenta drásticamente el riesgo de padecer enfermedades. Si aún tienes el vicio, este año puedes deshacerte de él.

En lugar de comprar paquetes grandes de cigarros, opta por cajetillas individuales; siéntate en una silla diferente en el comedor para cambiar tu rutina; haz cita con un acupunturista, pues se ha demostrado que esta terapia reduce el antojo de fumar. Si no fumas, puedes disminuir tu consumo de alcohol, grasas saturadas y harinas blancas.

Consigue un nuevo empleo

Quizá quieras cambiar de profesión, o tal vez hace poco te hayas quedado sin empleo. Sea cual sea tu caso, puedes empezar por mantener actualizado tu currículum vitae. Y si no tienes un CV en línea, es hora de empezar a prepararlo y subirlo a una de tantas plataformas de búsqueda de empleo.

Contempla el mundo… ¡o tu ciudad!

Adquiere una nueva perspectiva de las cosas, en sentido literal y figurado, cambiando de ambiente. Lo anterior no significa que tomes un avión y te dirijas a un lugar remoto; hay infinidad de sitios cerca de donde vives.

Encuentra la paz interior

Si tan solo pensar en estos cambios te provoca estrés, haz el propósito de relajarte. Yoga, meditación, tai chi, jardinería… son muchas las opciones que tienes al alcance. ¡Feliz Año Nuevo!